Técnicas de relajación psicología

La terapia de relajación en la salud mental

Algunos de los estudios analizados en esta hoja informativa comparan las técnicas de relajación con la terapia cognitivo-conductual. La terapia cognitivo-conductual es un tipo de tratamiento psicológico que ayuda a una persona a tomar conciencia de formas de pensar que pueden ser automáticas pero que son inexactas y perjudiciales. La terapia implica esfuerzos para cambiar los patrones de pensamiento y, por lo general, también los patrones de comportamiento.

Otras prácticas de salud complementarias, como la terapia de masaje, la meditación, el yoga y el tai chi, pueden producir varios efectos beneficiosos en el cuerpo, incluida la respuesta de relajación; sin embargo, estas prácticas no se tratan en esta hoja informativa. Para obtener información más detallada sobre estas prácticas, consulte «Terapia de masaje: Lo que hay que saber», «Meditación», «Yoga: lo que hay que saber» y «Tai Chi y Qi Gong».

¿Pueden los niños y adolescentes beneficiarse de las técnicas de relajación? Algunas técnicas de relajación pueden ayudar a los niños y adolescentes con el dolor, la ansiedad y la depresión, los dolores de cabeza o la dificultad con los procedimientos relacionados con las agujas. Pero gran parte de la investigación de apoyo fue calificada como de baja calidad, por lo que aún no tenemos una imagen completamente clara de los posibles beneficios.

Técnicas de relajación para el estrés

La relajación en psicología es el estado emocional de un ser vivo, de baja tensión, en el que hay una ausencia de excitación, especialmente de fuentes negativas como la ira, la ansiedad o el miedo. Según los Diccionarios Oxford[2] la relajación se produce cuando el cuerpo y la mente están libres de tensión y ansiedad. La relajación es una forma de éxtasis leve que proviene del lóbulo frontal del cerebro, en el que la corteza posterior envía señales a la corteza frontal a través de un sedante suave[cita requerida] La relajación puede lograrse a través de la meditación, la autogenia y la relajación muscular progresiva. La relajación ayuda a mejorar el afrontamiento del estrés. El estrés es la principal causa de problemas mentales y físicos,[3] por lo que sentirse relajado es beneficioso para la salud de una persona. Cuando estamos estresados, el sistema nervioso simpático se activa porque estamos en un modo de respuesta de lucha o huida; con el tiempo, esto podría tener efectos negativos en el cuerpo humano.

Leer más  Deja de ser tú la mente crea la realidad

La idea de la relajación en psicología fue popularizada por el Dr. Edmund Jacobson en su libro publicado Relajación progresiva. Era un libro técnico destinado a médicos y científicos. Su libro describe la tensión y la relajación de músculos específicos a la vez para lograr la relajación general del cuerpo[4] Jacobson luego publicó otro libro llamado You Must Relax (Usted debe relajarse) publicado en 1934 que estaba dirigido al público en general. Según Jacobson, sus investigaciones comenzaron en 1908 en la Universidad de Harvard, para pasar después a Cornell y a la Universidad de Chicago. Sus investigaciones estaban orientadas a mejorar el bienestar humano en general[cita requerida].

Técnicas de relajación para la ansiedad

Todos nos enfrentamos a situaciones estresantes a lo largo de nuestra vida, desde pequeñas molestias como los atascos hasta preocupaciones más serias, como la grave enfermedad de un ser querido. Sea cual sea la causa, el estrés inunda el cuerpo de hormonas. El corazón late con fuerza, la respiración se acelera y los músculos se tensan.

Leer más  Como gestionar las emociones

Esta llamada «respuesta al estrés» es una reacción normal ante situaciones amenazantes, perfeccionada en nuestra prehistoria para ayudarnos a sobrevivir a amenazas como el ataque de un animal o una inundación. Hoy en día, rara vez nos enfrentamos a estos peligros físicos, pero las situaciones desafiantes de la vida cotidiana pueden desencadenar la respuesta al estrés. No podemos evitar todas las fuentes de estrés en nuestras vidas, ni queremos hacerlo. Pero podemos desarrollar formas más saludables de responder a ellas.

1. Centrarse en la respiración.  En esta sencilla y poderosa técnica, se realizan respiraciones largas, lentas y profundas (también conocidas como respiración abdominal). Al respirar, se desconecta suavemente la mente de los pensamientos y las sensaciones que la distraen. La concentración en la respiración puede ser especialmente útil para las personas con trastornos alimentarios, ya que les ayuda a centrarse en su cuerpo de forma más positiva. Sin embargo, esta técnica puede no ser adecuada para quienes tienen problemas de salud que dificultan la respiración, como las dolencias respiratorias o la insuficiencia cardíaca.

Técnicas de relajación para la ansiedad pdf

Una técnica de relajación (también conocida como entrenamiento en relajación) es cualquier método, proceso, procedimiento o actividad que ayuda a una persona a relajarse; a alcanzar un estado de mayor calma; o a reducir de otro modo los niveles de dolor, ansiedad, estrés o ira. Las técnicas de relajación se emplean a menudo como un elemento de un programa más amplio de gestión del estrés y pueden disminuir la tensión muscular, reducir la presión arterial y disminuir el ritmo cardíaco y respiratorio, entre otros beneficios para la salud[1].

Leer más  Objetivos de la psicologia

Las personas responden al estrés de diferentes maneras, es decir, agobiándose, deprimiéndose o ambas cosas[2] El yoga, el QiGong, el Taiji y el Pranayama que incluye la respiración profunda tienden a calmar a las personas agobiadas por el estrés, mientras que el ejercicio rítmico mejora la salud mental y física de quienes están deprimidos. A las personas que se encuentran con ambos síntomas simultáneamente, sintiéndose deprimidas en algunos aspectos y sobreexcitadas en otros, les puede ir mejor caminar o realizar técnicas de yoga centradas en la fuerza[2].

Las investigaciones publicadas en la década de 1980 indicaron que existían vínculos más fuertes entre el estrés y la salud, y mostraron los beneficios de una gama más amplia de técnicas de relajación de lo que se conocía hasta entonces. Esta investigación recibió la atención de los medios de comunicación nacionales, incluido un artículo del New York Times en 1986[1].